Por: Andrea Tíjaro.
En la lectura “Reflexiones fundamentales sobre la responsabilidad”, Jaime Espejo confiere al ser humano la capacidad de reconocerse así mismo, su entorno y por tanto, de repensarse, y transformar su exterior. De ahí que el ejercicio de la responsabilidad social esté dirigido al interior del ser y a su entorno, por ende requiere el ponderamiento de las repercusiones de pensar y actuar de forma individual produciendo consecuencias sociales inevitables.
En este sentido, se determina la propiedad del ser humano de definir el rumbo de su existencia a través de sus decisiones, de construir un camino, de lo cual se deduce una definición de responsabilidad, “Se constituye como la capacidad de una persona o de una colectividad de responder ante sí mismo y ante los demás” .
No obstante, el agregado brindado por Juan Fernando Pacheco, vicerrector académico de Uniminuto, de concebir ese actuar como de ser ciudadano, le confiere al concepto de responsabilidad social, un alcance más global que aborda los deberes de una persona que pertenece a un país como Colombia, y por tanto requiere ser consciente de los parámetros establecidos para ejecutar acciones que desemboquen en acciones colectivas, tomando este último término como la posibilidad de unión de la ciudadanía en la consecución de validación de sus derechos y la ejecución de planes de acción en su beneficio.
Así mismo, se nombraron tipos de responsabilidades sociales demarcadas por sectores sociales como la del ámbito público, la de las ONG`s, que abarcan ese extenso término, de las cuales retomo la responsabilidad social empresarial, visibilizando la influencia de las empresas en nuestro tejido social-cultural.
Como docente, en mis cátedras varios estudiantes se perfilan como empresarios y otros como empleados proactivos, instancia que me motiva a recalcarles el compromiso social que asumen cuando se apropian de alguno de esos dos papeles, ya que de su desempeño y labor dependen la ejecución e implementación de criterios de mejoramiento de la calidad de vida de sí mismos y de otros que se reflejan en la creación de trabajos dignos, criterios de remuneración justos, condiciones propicias de ambiente laboral, reductibles del reconociendo al trabajador como un ser humano integral.
También, un aspecto relevante lo constituye, la acción voluntaria hacia el exterior de la empresa en consecución del bienestar social, específicamente sus contribuciones en proyectos sociales, e iniciativas que contribuyen a la proliferación de sectores vulnerables; acción retomada como compromiso con la sociedad, contraria a los criterios de caridad que no brindan ayudas significativas y estables en términos monetarios.
Dicho aspecto, propicia la reflexión sobre el servicio que se brinda como entidad. Actualmente, la empresa o mejor, el establecimiento educativo al que pertenezco: Uniminuto, propone la puesta en escena de la responsabilidad social en el actuar cotidiano con la ejecución de los principios y valores de la institución, que han sido formados con bases cristianas. Dicho servicio me permite sentirme a gusto con el ejercicio de mi profesión y le brinda un valor agregado, sentido a mi oficio y es la contribución al bienestar social, permitiéndome hacer parte de una posibilidad accesible a una educación de calidad.
Bibliografía:
Espejo, Jaime. (2006).Reflexiones fundamentales sobre la responsabilidad. Universidad Minuto de Dios. CED Centro de Educación para el Desarrollo.
En este sentido, se determina la propiedad del ser humano de definir el rumbo de su existencia a través de sus decisiones, de construir un camino, de lo cual se deduce una definición de responsabilidad, “Se constituye como la capacidad de una persona o de una colectividad de responder ante sí mismo y ante los demás” .
No obstante, el agregado brindado por Juan Fernando Pacheco, vicerrector académico de Uniminuto, de concebir ese actuar como de ser ciudadano, le confiere al concepto de responsabilidad social, un alcance más global que aborda los deberes de una persona que pertenece a un país como Colombia, y por tanto requiere ser consciente de los parámetros establecidos para ejecutar acciones que desemboquen en acciones colectivas, tomando este último término como la posibilidad de unión de la ciudadanía en la consecución de validación de sus derechos y la ejecución de planes de acción en su beneficio.
Así mismo, se nombraron tipos de responsabilidades sociales demarcadas por sectores sociales como la del ámbito público, la de las ONG`s, que abarcan ese extenso término, de las cuales retomo la responsabilidad social empresarial, visibilizando la influencia de las empresas en nuestro tejido social-cultural.
Como docente, en mis cátedras varios estudiantes se perfilan como empresarios y otros como empleados proactivos, instancia que me motiva a recalcarles el compromiso social que asumen cuando se apropian de alguno de esos dos papeles, ya que de su desempeño y labor dependen la ejecución e implementación de criterios de mejoramiento de la calidad de vida de sí mismos y de otros que se reflejan en la creación de trabajos dignos, criterios de remuneración justos, condiciones propicias de ambiente laboral, reductibles del reconociendo al trabajador como un ser humano integral.
También, un aspecto relevante lo constituye, la acción voluntaria hacia el exterior de la empresa en consecución del bienestar social, específicamente sus contribuciones en proyectos sociales, e iniciativas que contribuyen a la proliferación de sectores vulnerables; acción retomada como compromiso con la sociedad, contraria a los criterios de caridad que no brindan ayudas significativas y estables en términos monetarios.
Dicho aspecto, propicia la reflexión sobre el servicio que se brinda como entidad. Actualmente, la empresa o mejor, el establecimiento educativo al que pertenezco: Uniminuto, propone la puesta en escena de la responsabilidad social en el actuar cotidiano con la ejecución de los principios y valores de la institución, que han sido formados con bases cristianas. Dicho servicio me permite sentirme a gusto con el ejercicio de mi profesión y le brinda un valor agregado, sentido a mi oficio y es la contribución al bienestar social, permitiéndome hacer parte de una posibilidad accesible a una educación de calidad.
Bibliografía:
Espejo, Jaime. (2006).Reflexiones fundamentales sobre la responsabilidad. Universidad Minuto de Dios. CED Centro de Educación para el Desarrollo.
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